—[186]→ —[187]→
Los idiomas que se consideran como afines del mutsun son el rumsen, el achastli y el soledad. Por mi parte, agrego el costeño o costanos, fundado en algunas comparaciones que he podido hacer.
El rumsen se habla en las cercanías de Monterey, Alta California. He aquí algunos ejemplos de ese idioma comparado con el mutsun.
—188→Mutsun | Rumsen | |
Padre | Appa | Appan |
Madre | Anan | Aan |
Hijo | Sitnun | En-shinish |
Hija | Ka | Ka-ana |
Sol, día | Ismen | Ishmen |
Luz | Charko | Shorto |
Agua | Zi, si | Ziy |
Arco (arma) | Lahuan | Lahuan |
Flecha | Tios | Teps |
Pequeño | Hu-icku-gtel | P-ishi-t |
Dos | Utsjin | Ultis |
Tres | Kapjan | Kapes |
Cuatro | Utsit | Ultisim |
Ocho | Taitimin | Ultumai-shakem |
Nueve | Pakki | Pakke |
Diez | Tanksagte | Tamchagt |
El achastli se considera por algunos indianistas como lengua hermana del rumsen, clasificación confirmada por las comparaciones que han podido hacerse. Ejemplo.
Rumsen | Achastli | |
Uno | Enjala o enkala | Moukala |
Dos | Ultis | Outis |
Tres | Kapes | Kapes |
Cuatro | Ultisin | Ouliti |
Cinco | Hali-izu | Iz |
—189→ | ||
Seis | Hali-shakem | Ete-sake |
Siete | Kapkamai-sha-kem | Kaleis |
Nueve | Pakka | Pak |
Diez | Tamchagt | Tonta |
El achastli se habla en la misión de San Carlos.
Ludewig, al hablar del mutsun, da la siguiente noticia sobre el idioma que se habla en la misión de la Soledad: «The Mutsun appears to be identical with that of the Mission of la Soledad on the Salinas».
La siguiente comparación de los adjetivos numerales confirma el dicho de Ludewig
Mutsun | Soledad | |
Uno | Hemetscha | Himitsa |
Dos | Utsjim | Utsje |
Tres | Kapjan | Tkapka |
Cuatro | Utsit | Utjit |
Cinco | Parue | Paruash |
Seis | Nakichi | Imi-nuksha |
Siete | Tsa-kichi | Udu-ksha |
Ocho | Taitimin | Taitemi |
Nueve | Pakki | Uatso |
Diez | Tanktsagte | Maktoso |
Sólo difieren los dos últimos nombres. Debo advertir —190→ aquí que Duflot de Mofras confundió el rumsen con el soledad en su obra Exploration de l'Oregón, tomo 2, página 401.
El idioma costeño o costanos se llama así porque se habla en la costa de California. Las tribus de la Bahía de San Francisco que estuvieron bajo la vigilancia de la misión de Dolores eran cinco, una de ellas los olhomes llamados por los españoles costeños; los norteamericanos o ingleses les llaman costanos. Voy a presentar ejemplos de las comparaciones en que me fundo para agregar el costeño a la familia mutsun.
Mutsun | Costeño | |
Niño | Ko-chino-gnis | Chini-smuk |
Padre | Appa | Ahpah |
Madre | Anan | Nah |
Esposo | Maku | Mako |
Hermano | Tagnan (taknan) | Takah |
Mano | Isu | Rsu |
Ojo | Jin | Re-jin |
Nervio | Jurek | Jurake |
Lengua | Lasse | Tassek |
Oreja | Tugsus | Tuorus |
Diente | Sit | Siit |
Pecho | Tukai | Tek |
Uña | Turis | Tur |
Hueso | Thrati | Trii |
Pelo | Uri | Uli |
Nariz | Us | Us |
—191→ | ||
Piedra | Irek | Irek |
Tierra, campo | P-iret | Uohrep |
Fuego | Soton | Rorton |
Agua | Si | Sii |
Sol | Ysmen | Yshmen |
Especie de mosca | Mumuri | Momua |
Pequeño | Huichugtel | Uchischus |
Yo | Kan | Kahnah |
Nosotros | M-akse | H-akche (h-akse) |
Quien | Ate | M-atu |
Tú | Men | Mene |
Vosotros | Makam | Makun |
Aquél | Huak | Huahchi (huakchi). |
Comer | Ama | Ahmuch |
Morir, matar | S-emon | M-eme |
Hoy, ahora | N-aja | T-aja-hte |
Mañana | Aru-tu | Usri-ch |
Sí | G-ehe, he | He-ah |
No | Ekue | Ekui |
Nótese que en el costeño se halla la final ah (aj) de que hemos tratado en el capítulo 21.
M. Charencey, en su opúsculo Notice sur quelques familles de langues du Mexique, considera el idioma que se habla en la misión de San Miguel como afín del mutsun, y en prueba de ello compara los adjetivos numerales; —192→ pero tomando equivocadamente por idioma de San Miguel el rumsen. Los adjetivos numerales del rumsen pueden verse en uno de los párrafos anteriores. Los de San Miguel son los siguientes, con poca o ninguna analogía con aquéllos.
Uno, tohi.
Dos, kugsu.
Tres, tlubahi.
Cuatro, kesa.
Cinco, oldrato.
Seis, piaite.
Siete, tepa.
Ocho, sratel.
Nueve, teditrup.
Diez, trupa.
—[193]→
«Los españoles -dice Clavijero en su Historia de la Baja California- encontraron en esta península tres naciones, que aún existen en el día, a saber: los Pericúes, los Guaicuras y los Cochimíes. Los Pericúes ocupan la parte austral de la península, desde el Cabo de San Lucas hasta los 24º, y las islas adyacentes de Cerralvo, el Espíritu Santo y San José: los Guaicuras se establecieron entre el paralelo de 23º 30' y el de 26º, y los Cochimíes tomaron la parte septentrional desde los 25º hasta los 33º, y algunas islas del mar Pacífico. Cada una de estas tres naciones tenía su lengua propia. La lengua pericú ya no existe, y los pocos individuos que han quedado —194→ de aquella desgraciada nación hablan hoy en español».
Hervás, en su Catálogo (tomo 1, página 348), fundado en las noticias que recibió del padre Barco, misionero en la Baja California, considera como dialectos del guaicura el loretano, el cora, el uchitie y el aripe.
Venegas, en su Noticia de la California (tomo 1.º, página 63), opina con el padre Taraval que el loretano se dividía en dos ramas: guaicura y uchití.
Clavijero (opere citato) parece haber combinado las dos noticias anteriores, pues dice: «La lengua guaicura tenía tantos dialectos cuantos eran las ramas de la nación que la hablaban, a saber; guaicuras propiamente dichos, aripas, uchitas, coras e indios de Conchó llamados después lauretanos por el pueblo de Loreto que se fundó cerca de ellos».
Orozco en su Geografía de las lenguas de México (página 60) sigue la misma clasificación adoptada por Clavijero.
El padre Bagert, a quien se atribuye la Noticia de California (Mannheim, 1773), dice literalmente: «Sin hablar de las otras cinco lenguas enteramente diferentes entre sí que se hablan en la California que son la Laymona cerca de la misión de Loreto; el Cotschtmí en la Misión de San Javier y más al Norte; el Utschití y el Pericúa al Sur, y la lengua aún desconocida que hablan los pueblos que el P. Link encontró en su viaje; sin hacer caso además de una multitud de dialectos, trataré sólo del Waicurio que con la ayuda de Dios he aprendido».
Conforme a esta relación debíamos apartar el uchití —195→ del guaicura; pero sobre haber en contra mayor número de opiniones, es fácil explicar por qué razón Bagert tomó como idiomas enteramente distintos al guaicura y el uchití. El padre Barco manifiesta que «los dialectos cora, uchití y aripe eran entre sí no poco diversos».
Venegas, refiriéndose a Tarraval, se explica más terminantemente diciendo: «Tres son las lenguas: cochimí, pericú y la de Loreto conchó; de esta última salen dos ramos y son la guaicura y la uchití: verdad es que es la variación tanta, que el que no tuviese conocimiento de las tres lenguas juzgará no sólo que hay cuatro sino cinco».
Pues bien, al padre Bagert, que sólo conocía el guaicura, sucedió lo que indicaba Tarraval, esto es, que tomó el uchití como enteramente distinto del guaicura.
En realidad, lo que debe admitirse, y nosotros admitimos, es que el guaicura se encontraba dividido en varios idiomas afines; pero tan distintos entre sí que no merecen la calificación de dialectos sino de lenguas hermanas.
Latham en su Filología comparativa (capítulo 57) adopta el error de Bagert sin examen alguno. También se equivocó Bagert en suponer al laimon y al cochimí como lenguas distintas, según explicaremos en el capítulo siguiente.
Respecto al origen de los californios, no hay más que decir sino que ellos mismos lo ignoraban; preguntados por los misioneros, no sabían decir otra cosa sino que sus antepasados habían venido del norte.
—196→Los californios son semejantes en su fisonomía a los pueblos de México; pero eran muy diferentes respecto al estado de su civilización, pues estaban completamente en la barbarie, no teniendo conocimientos de arquitectura, agricultura ni otras artes de primera necesidad. «En toda la península -dice Clavijero- no se halló una casa ni vestigio de ella, ni tampoco una cabaña, una vasija de barro, un instrumento de metal o un lienzo cualquiera. Sus habitantes se sustentaban con aquellas frutas que se producen espontáneamente o con los animales que cazaban y pescaban, sin tomarse el trabajo de cultivar la tierra, de sembrar, o de criar animales».
Para tratar del vaicura me he valido de la Relación de Bagert, citada anteriormente, única que existe donde se dé alguna noticia del idioma, y de cuya relación recibí un ejemplar de Europa como curiosidad bibliográfica. Al publicar la primera edición de la presente obra sólo pude disponer de las breves noticias que trae el Mithridates, extracto del mismo Bagert.
Según este autor, el guaicura es un idioma «en alto grado salvaje y bárbaro», por su pobreza de palabras y de formas gramaticales. Me parece exagerado este juicio, pues los guaicuras podían expresar todo lo que necesitaban según su condición social; fue posible traducir a su idioma oraciones que, como las cristianas, contienen conceptos metafísicos, y la gramática guaicura contiene reglas aun para la eufonía.
He aquí lo que sobre el dictamen de Bagert ha observado juiciosamente Court de Gébelin (Monde primitif):
—197→Buschmann, en su obra Die Spuren etc. (página 356), niega la analogía del vaicura con el mexicano, sonorense y comanche. Éste es un error que yo también asenté en —198→ un artículo inserto en el Boletín de la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística, habiéndome fundado en algunas comparaciones con la lengua cora de Jalisco. Un conocimiento más profundo del vaicura y comparaciones más minuciosas me han decidido a colocar este idioma en el grupo mexicano (azteca, sonorense, comanche). He aquí esas comparaciones. Véase también el capítulo siguiente, § 4.
No se encuentran en el guaicura las letras f, g, l, e, x, z o s. Sin embargo, la x mexicana (sh), la z o s se suplen con la tsch propia del vaicura. La o se suple con la u; recuérdese que en mexicano hay una u de sonido entre o y u, y que en tepehuan se confunden la o y la u. La f no se encuentra en mexicano, sonorense ni comanche. La g no se halla en mexicano, cahita ni cora. La l falta en ópata, eudeve, pima y cora; se suple con la r suave, y lo mismo en vaicura. La letra propia de este idioma tsch recuerda la del mutsun zs que suena tcha, tche, etc.
El guaicura es polisilábico como el mexicano, sonorense y comanche.
La composición se usa en guaicura como en las tres familias de idiomas con que le comparo. Ejemplos. Tekerakadatemba, significando cielo es un compuesto de datemba, tierra, y tekeraka, arqueada. —199→ Tiapatu es otro compuesto que significa «el que tiene su casa en el norte».
Algunos sustantivos forman plural por medio de una partícula prepositiva o una final. Según el ejemplo que trae Bagert, la final guaicura de plural es ma, la cual es enteramente igual en mutsun, y análoga a las de igual objeto gramatical me en mexicano, m en cahita, mea, en cora, me, m en eudeve, y ne en comanche; ya sabemos que n y m conmutan en estos idiomas. La partícula prepositiva del guaicura para expresar plural, según el ejemplo que trae el mismo Bagert, es k; anai, mujer; kanai, mujeres. Al tratar del verbo haré una observación sobre el signo k.
El guaicura no tiene finales para marcar el caso, como tampoco las tienen el mexicano, el comanche y la mayor parte de las lenguas ópatas.
Los adjetivos que faltan en guaicura se expresan agregando la negación a los que tienen significado contrario; verbi gratia, de ataka, bueno, y ra, no, sale atakara, malo. Este mismo sistema hemos visto usado en mexicano y las lenguas sonorenses (capítulo 11). La negación ra, convertida en ri, se agrega al pronombre personal en la conjugación del verbo, modo optativo o subjuntivo, cuando se quiere expresar negación.
Los pronombres personales son be, yo; li, tú; tutan, él; cate, nosotros; peti, vosotros; tucava, ellos. No hay pronombre relativo.
Los posesivos son:
—200→Be, me, mi, m, mío.
Ei, e, et, tuyo.
Ti, te, t, suyo.
Kepe, nuestro.
Pocos sustantivos se usan en guaicura sin el agregado del posesivo, y lo mismo, con más o menos extensión, hemos observado en todos los idiomas hasta aquí descritos, principalmente cuando esos sustantivos expresan nombres de parentesco, o miembros del cuerpo. A los posesivos, en guaicura, se suele agregar la sílaba kun, análoga a kauh que se agrega en mexicano a nombres que expresan posesión; en sonorense gua (kua) (capítulo 11).
Cuando el sustantivo comienza con vocal, se agrega al posesivo, en guaicura, d o t, o se omite la final, regla eufónica que tiene muchos ejemplos análogos en mexicano, ópata, etc.
Los pronombres, en guaicura, marcan las personas del verbo; verbi gratia, be amukirere, yo juego; ei amukirere, tú juegas; también se pospone el pronombre; verbi gratia, dai, tú estás. Esto mismo hemos visto en los idiomas del grupo mexicano, e igual circunstancia se verifica respecto al medio de que se vale el guaicura para marcar los tiempos, que es el uso de finales. En guaicura hay presente, pasado y futuro de indicativo, formados sobre el infinitivo como radical. Acerca del infinitivo de estos idiomas haré una observación importante en el resumen gramatical (capítulo 29). Las finales guaicuras son re o reke de presente; rujere, raupe, rauperi, rikiri de —201→ pretérito: me, meje, eneme de futuro. Estas finales tienen sus análogas en los idiomas siguientes. Ra de presente en tarahumar; ria en ópata; riru, ri, ru en eudeve; ri, rek en tarahumar; rhijeri en pima; iki en tepehuan, de pretérito. Muku, muju de futuro en pima, mokue, mojue, en tepehuan; en tarahumar se encuentran también los finales meri, mera de participio y gerundio expresando tiempo venidero; en ópata y cahita hay un participio de futuro en ma.
El imperativo, en guaicura, tiene por signo la final tei para la segunda persona de singular; en plural tu, semejantes a las del igual objeto en ópata te, en mutsun ti, t, uts.
Signo de optativo en guaicura es la final rujerera, rikirikara que recuerda las parecidas del tarahumar reyeke, y del ópata kiru.
El guaicura tiene infinito como el mutsun, y como también parece tenerlo el comanche. Igualmente tiene gerundio, aunque no domina tanto como en las lenguas ópatas, siendo sus más comunes finales, en lo que he podido observar, ene y me, afines, pues lo son los sonidos n, m. En tarahumar hay un gerundio en me-re; en pima mi. En ópata, cahita, pima y cora hay participios terminados en urre y en me. (Véase capítulo 12).
Se encuentra en guaicura un participio que generalmente termina en urre o kurre, final semejante a algunas de los participios o verbales comparados en otro fugar (capítulo 12), como en ópata karara, en pima kara.
En el idioma que nos ocupa hay verbos plurales y —202→ singulares, como los hemos visto en las lenguas ópatas, y especialmente en mutsun, formándose por medio de la partícula antepuesta, ku, k; verbi gratia, jake, charlar una persona; kuake, charlar varias personas. Pero lo más notable es que el sonido k, marcando plural en el verbo guaicura, así como en el nombre, según vimos antes, figura mucho para señalar también el número plural en varios tiempos del verbo mexicano. (Mexicano, § 25).
En el idioma guaicura no he visto que la preposición se posponga a su régimen; pero sí el adverbio y la conjunción, del mismo modo que en algunas lenguas ópatas y en mutsun; verbi gratia, en este idioma las conjunciones aia, hi, hia; en pima, upu api; en eudeve, aui vai.
Las comparaciones léxicas relativas al guaicura son pocas, porque tienen que limitarse a las palabras insertas en la breve noticia de Bagert, ya citada.
Recuérdense las reglas etimológicas varias veces comprobadas.
HOMBRE
Guaicura. Ete, ti. Cora (del nayarit). Teuit. Pima y tepehuan. Te-oti. Comanche. Te-napa, tua-vischi.
MUJER
Guaicura. A-nai. Ópata. Nau (mujeres). Yutah. Nai-hah.
—203→PADRE
Guaicura. Dare (tale). Mexicano. Tatli. Caigua. Tauat, taui.
HIJO
Guaicura. Ti-shanu. Mutsun. Sitnu-n.
CABEZA, FRENTE
Guaicura. Apa. Comanche. P-api. Kizh. Apoan.
NARIZ
Guaicura. Namu. Cahuillo. Nemu. Netela. Nomun.
SOL
Guaicura. Untai-ri (untai-li). Mexicano. T-onati-uh. Jaliscience. T-onali. Ópata. T-onoli.
TIERRA
Guaicura. Da-temba. Cahuillo. Temu-l.
COMIDA
Guaicura. Bue. Cahita. Bua-game.
BUENO
Guaicura. Ataka. Cuchan. A-(ho)-tekah. Mojave. Ahtk. Cahuillo. Atai.
GRANDE
Guaicura. Pane. Comanche. Paop.
—204→VIVO, VIDA
Guaicura. T-epe. Cahita. H-iepsa.
TÚ
Guaicura. Ei. Cahita. E. Wihinasht. I.
TÚ
Guaicura. Ekun. Chemegue. Ha-iku.
ÉL, AQUÉL
Guaicura. Tu-tan. Tarahumar. Ta o ra. Shoshone. Ton, tan.
NOSOTROS
Guaicura. K-ate. Pima. Ati. Tepehuan. Atu-m.
AQUÉLLOS
Guaicura. T-ukava. Pima. Ukama. Mutsun. N-upkan.
MÍO
Guaicura. Ma, m. Cahita. I-m, m.
TUYO
Guaicura. Ei, e. Cahita. E. Cora. Ei-ia. Cahuillo. Eh.
SUYO
Guaicura. Ta, te, ti. Mexicano. Te (ajeno, de otro). Tarahumar. Ta. Pima y tepehuan. Di (ti).
—205→ÉSTE, ÉSE
Guaicura. Jat-upe, ta-upe. Cora. Aehpu. Mojave. P-epa. Kizh. Pae. Chemegue. Eimpu.
CHARLAR, HABLAR
Guaicura. J-ake. Cahita. N-okae. Ópata. N-ukuai. Comanche. T-ekua-den, t-akuo-n.
JUGAR
Guaicura. Amu-kiri. Mexicano. Ama-patoa.
CONOCER
Guaicura. A-(ka)-tui. Cahita. Ataia.
MATAR
Guaicura. Tsch-aka. Mexicano. M-uki. Cora. He-ika-t. Pima. M-uka. Cahuillo. M-eka. Chemegue. P-akai.
SER, ESTAR
Guaicura. Kea. Mexicano. Ka. Ópata. Kak.
ESTAR
Guaicura. Dar, tar. Pima. Ta. Comanche. Tza, tzare.
DAR
Guaicura. Ke, ken. Mexicano. Ma-ka. Pima. Ma-ka.
HACER
Guaicura. Tujake. Cora. Tajua.
—206→QUERER
Guaicura. Kubu. Mojave. Ko-kebu-t.
MANDAR
Guaicura. Yebis-tschene. Ópata. Tane. Tepehuan. Teane.
SOBRE
Guaicura. Tina. Mexicano. Tepan.
DE, EN
Guaicura. Te, pe. Mexicano. Tech. Ópata. Thu. Mutsun. Tea.
Y, TAMBIÉN
Guaicura. Tschie. Tarahumar. U-che.
Las palabras análogas corresponden a cerca de una mitad de las comparadas.
He aquí el Padre nuestro en guaicura.
Kepe-dare | tekerekadatemba | daï, | ei-ri | akatuike |
Nuestro padre | (que en el) cielo | estás, | te | reconocemos |
pu-me, | tschakarrake | pu-me | ti | tschie. |
todos (los que) existimos, | (y te) alaban | todos (los que) somos | hombres | y. |
—207→ | ||||
Ecun | gracia | ri | atume | cate |
(Y por) tu | gracia | ? | tengamos | nosotros |
tekerekedatemba | tschie. | Ei-ri | jebarrakeme | ti |
(el) cielo | (y). | Te | obedeceremos | (los) hombres |
pu | jaupe | datemba | pae | ei |
todos | aquí | (en la) tierra | como | a ti |
jebarrakere | aëna | kea. | Kepekun | bue |
obedientes | arriba | siendo. | Nuestra | comida |
kepe | ken | jatupe | untairi. | Kate |
(a) nos | da | este | día. | (Y a) nos |
kuitscharrake | tei | tschie | kepecun | atakamara, |
perdona | (y) | nuestro | malo (pecado), | |
pae | kuitscharrakere | cate | tschie | cavape |
como | perdonamos | nosotros | también | (a) los |
atacamara | kepetujake. | Cate | tikakamba | tei |
(que) mal | (nos) hacen. | (A) nos | ayuda | |
tschie | cuvume | ra | cate | uë |
(no) querremos | no | nosotros | algo | |
atukiara. | Kepe | kakunja | pe | atacara |
malo. | (Y a) nos | protege | de | mal |
tschie. | ||||
(y). |
Kepedare: kepe, pronombre posesivo; dare, sustantivo.
—208→Tekerekadatemba: esta palabra significa «tierra arqueada,» y con ella se suple el sustantivo cielo.
Ei-ri: Bagert traduce «a ti que pues», lo cual nos parece impropio supuesto que el idioma carece de relativo. Sin embargo, no sabemos qué significa aquí la final ri, pues según lo que hemos visto anteriormente, se usa en optativo con negación. Ei es el pronombre de la segunda persona de singular.
Akatuike: la final ke debe ser un abreviado de reke, propia de indicativo presente.
Pu-me: Bagert traduce «todos somos», y sin embargo, en otros lugares del Padre nuestro vemos otras dos formas traducidas por ser a estar, que en nada se parecen a me, y son dai, estás; kea, siendo. El verdadero significado acaso sea «todos los que existimos».
Tschakarrake: la final ke debe ser contracción de reke, terminación de indicativo presente. Nótese el circunloquio que es preciso usar, por la pobreza del idioma, para expresar de alguna manera las palabras de nuestra oración dominical, «santificado sea tu nombre».
Tschie: conjunción pospuesta, según el uso del idioma, y que para nosotros debe ir antes del verbo alabar, donde la hemos puesto entre paréntesis.
Ecun: hemos dicho que cun o kun se suele agregar a los posesivos.
Ri: aquí se ofrece la misma duda que ya hemos manifestado sobre esta partícula.
Atume: según la final me es futuro, con cuyo tiempo debe suplirse seguramente el subjuntivo.
—209→Jebarrakeme: aquí se ve la final me de futuro.
Jebarrakere: la final es de indicativo presente; pero no hay signo de persona, y tal vez de esta manera significa el verbo como nombre, en guaicura, según sucede en otros idiomas mexicanos.
Ken: no se ve con este imperativo el signo propio del modo.
Kuitscharrake tei: tei es signo de imperativo, compuesto del pronombre ei y la partícula t.
Atakamara: significa mal, malo, cosa mala, compuesto de ataka, bueno, y la negación ra, no.
Tikakamba tei: tei, signo de imperativo.
Cuvume: me es terminación de futuro.
Ra: adverbio pospuesto. Obsérvese de nuevo todos los circunloquios de que tiene que usar el guaicura para traducir nuestro idioma.
Kakunja: no se ve con este verbo el signo de imperativo.
Las demás palabras que no se explican se comprenderán con lo dicho, sin necesidad de repeticiones.