A veces triste yo me digo: Al pie de un sauce Laura suspiraba, Al resplandor sereno de la Luna Allá en el horizonte el rey del día Como cedro a las nubes sublimado, Cual sombra vana, mis lozanos días Cuando con garra impía, Cuando el sol reina en el cenit fulgente, Cuando en mi frente marchita Cuando en tu seno reclinado me hallo, Cuando inciertos giras «Cubrid con verdoso helecho, Dadme la lira de oro De los primeros amores El sol fulgente de mis bellos días, En ti Señor confío, En vano busco la mujer hermosa, Encantada y atónita mi mente Feliz aquel que de su patrio suelo Feliz tú que de bellas ilusiones Flor fragante y vistosa, Fui engendrado y tuve el ser Hubo, una melodía, Mortal desdichado No quiere tierna amiga ¡Oh noche! ¡oscuridad! del alma mía ¡Oh Patria, Patria nombre sacrosanto Presa de mil dolencias, Prestadme o sacras musas Qué importa al desgraciado Salid, salid del pecho Se alzó del polvo en noche tenebrosa, Silencio, nada más, y no gemido Tendido el lino la veloz barquilla Velado el horizonte Ven dulce amiga al monte, Ya deja ya el puerto Ya llegó el momento Yo soy una flor oscura
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