11
Esta bebida tan mexicana fue motivo de inspiración de los poetas que publicaron en el Diario, por ello podemos encontrar odas, anacreónticas, himnos e incluso algún soneto dedicados a este «delicioso néctar».
12
DdeM., t. II, núm. 137, p. 177.
13
Véase DdeM., t. IX, núm. 1070, p. 274.
14
DdeM., t. I, núm. 8, p. 32. Por otro lado, también sabemos que cerca de quince mujeres estaban suscritas al cotidiano, entre ellas destacamos a una condesa.
15
R. Wold, op. cit., p. 15. Por nuestra parte, citemos un aviso que publicó el Diario: «Aunque por estar muy cansada la letra de la imprenta de casa de Arizpe, se mudó la impresión del Diario a la oficina de Ontiveros, no por eso se han variado las suscripciones que continúan en la librería del primero: lo que se participa al público para su inteligencia y para que en lo sucesivo se ocurra en derechura con los anuncios y papeles de encargos a la imprenta de Ontiveros». DdeM., t. XII, núm. 1666, p. 464.
16
Sabemos por un anuncio publicado en el Diario que la imprenta de Juan Bautista fue comprada por José María de Benavente y a partir de 1814 los ejemplares del cotidiano llevaron su nombre impreso. Véase «Aviso» en DdeM. (segunda época), t. III, núm. 20, p. 3.
17
R. Wold, op. cit., p. 11.
18
DdeM., t. XV, núm. 2108, p. 41.
19
R. Wold, op. cit., p. 24.
20
DdeM., t. IX, núm. 1176, p. 705.