331
Historia de las misiones de la Compañía de Jesús en el Marañón español, por el padre José Chantre y Herrera de la misma Compañía, Madrid, 1901, pág. 728. (N. del A.)
332
La misión del Putumayo se estableció a instancia de los indios yuríes, pasees y mirañas, dirigida en 1782 a la Audiencia de Quito. El Guardián de Ocopa alegó estar dentro de su jurisdicción; y la Audiencia retiró los misioneros; pero luego el mismo Guardián imploró que volviesen, porque a causa de la escasez de operarios se vio en imposibilidad de servir debidamente la evangelización. Véase Cornejo y Osma, Documentos anexos a la Memoria del Perú presentados a S. M. el Real Árbitro, tomo III, pág. XIX. (N. del A.)
333
El padre Riofrío fundó tres pueblos: Nuestra Señora del Rosario, San Jacinto y San Carlos. Véase González Suárez, Historia general, tomo VI, pág. 196, nota 12. Véase también: «Las misiones dominicanas en el Oriente ecuatoriano», por el reverendo padre Alfonso M. Jerves, Ordo Praedicatorum, en El Oriente dominicano, n.º 6 y 7 de agosto y octubre de 1928. (N. del A.)
334
Véase: La Cuestión de Límites entre las Repúblicas del Ecuador y el Perú, por Segundo Álvarez Arteta, págs. 391 y sgts. (N. del A.)
335
La idea anticanónica de un obispado misional no era enteramente nueva. Ya se la había esbozado en tres ocasiones diversas, aunque sin buen éxito, precisamente a causa de las dificultades que ofrecía su realización. Cornejo y Osma, Obra citada, tomo III, XXVIII y sgts. Debió pensarse únicamente en una prefectura apostólica; y aun ella no habría producido benéficos efectos, a causa de la extensión del territorio misional. (N. del A.)
336
Antonio Raimondi, El Perú, tomo III. Historia de la Geografía del Perú, Libro Segundo, pág. 2. (N. del A.)
337
Recuérdese que el padre fray Francisco Gil exigía al Virrey del Perú el 5 de diciembre de 1792, sesenta sacerdotes para atender debidamente las misiones; y que el padre Sobreviela representó asimismo al Virrey en 1791 el corto número de operarios que había «para la abundantísima mies que en el día presentan las montañas»
. El padre fray Francisco Álvarez de Villanueva obtuvo veintiocho religiosos de los cuarenta que había solicitado. Véanse los Documentos contenidos en la obra Juicio de Límites entre el Perú y Bolivia, Contestación al Alegato de Bolivia por el doctor Víctor M. Maurtua, Abogado y Plenipotenciario Especial del Perú, tomo sexto, págs. 275 y sgts. y 302 y sgts. (N. del A.)
338
Segundo Álvarez Arteta, Obra citada, pág. 450 y sgts. (N. del A.)
339
Sobre todos estos puntos relativos a la erección de la diócesis pueden consultarse las magistrales obras de los insignes defensores del dominio territorial del Ecuador, especialmente la Memoria histórico-jurídica del doctor Honorato Vázquez, pág. 53 y sgts., el Memorándum del doctor N. Clemente Ponce, pág. 12 y sgts., las obras de Álvarez Arteta, Vacas Galindo, etc., etc. (N. del A.)
340
Colección de documentos sobre límites ecuatoriano-peruanos, por el reverendo padre fray Enrique Vacas Galindo, tomo I, pág. 327. (N. del A.)